Una ciudad violentada

Junto al pueblo “pateamos” la ciudad...
Comenzamos a caminar con todos/as, en la búsqueda de un proyecto colectivo.
La marcha se ha hecho inretornable. Las bases dijeron que no, a la división.
Cuando un pueblo se pone de pie, puede ir de prisa o lentamente, pero no detiene su marcha.
La unidad en la diversidad, es lo que ocurrió : las nuevas lógicas de la ciudadanía reprueban las hegemonías, ayer fue una prueba de ello.
Grupos de vecinos/as con historias comunes, movilizados por el cansancio moral y la perversidad de los que gobiernan, protestaron pacíficamente por ser sujetos y no objeto de derechos.
Una comunidad en la búsqueda de “un lugar para vivir”.
Muchos años acumulados de bronca de ciudadanos y ciudadanas largamente violentados, hasta el límite del hartazgo, por no decir de la estupidez,
Fue una pueblada, porque “el fuego, para calentar .. tiene que encender desde abajo”.
Y el corazón fue caliente. Ese era “el fuego” que llevaba la gente . El otro lo pusieron ellos.
Las armas que disparaban a matar, no sabían que a ese fuego no lo pueden atravesar.
La criminalidad de los hechos tiene un solo responsable que reaccionó con la peor de las violencias la que puede ejercer el Estado.
Ahora somos nosotros/as y ellos.. El nosotros/as es: nuestra identidad colectiva. Uno de nuestros triunfos.
A este NOSOTROS/AS lo haremos indestructible porque seguiremos ampliándolo hasta que revirtamos la expulsión,
enmascarada en discursos de integración.
Ellos pueden seguir en el espectáculo y la clientela, nosotros responderemos desde la ciudadanía
El clow y la verticalidad, no impedirá la horizontalidad. Y aunque ejerzan. el mecenazgo con un sistemas de lealtades y traiciones , debatiremos con ideas.
Ellos podrán continuar con el bandolerismo, nosotros seguiremos con imaginarios de libertades .

P/D.- Como dice la leyenda, aún hay “zombis”: esos muertos-vivos que embrujados duermen a la espera de que en las noches caribeñas los vecinos se cuelen en los jardines de las casas, donde ellos moran; y les echen sal para despertarlos, y vuelvan a vivir.
Seguiremos echando la sal........para construir ese lugar.

Marta Fourcade
Secretaria Gremial - A.D.U. -

 

 

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