La Universidad Pública nuevamente atraviesa una difícil situación financiera. Al finalizar la administración anterior el Sistema de Educación Superior se vio sorprendido por un decreto y otras disposiciones de recorte presupuestario, que las Universidades rechazamos firmemente.

El problema persiste en el año en curso, ya que el PEN transfirió solo una parte de los fondos remanentes del presupuesto 1999, a lo que se suman los atrasos correspondientes al año 2000. Además, el proyecto de Ley de Presupuesto para el año próximo no solo no prevé las mejoras necesarias, sino que produce una reasignación de partidas que perjudican al sistema.

Los recursos presupuestarios, recibidos en tiempo y forma, son condición necesaria para garantizar una educación de calidad. La formación de recursos humanos, la investigación científica y la extensión lo requieren para apoyar su funcionamiento universitario con los niveles de calidad y excelencia que han sido tradicionales en la Universidad Publica Argentina.

Recordamos aun los dichos del Sr. Presidentes de la Nación en ocasión de iniciarse los cursos lectivos del presente año en el sentido de no reducir los montos asignados a las Universidades Nacionales por el Congreso Nacional, afirmaciones estas que no solo compartimos, sino que también valoramos.

Ante este panorama, este Consejo ha resuelto hacer saber esta grave situación a toda la comunidad, que ya nos ha acompañado en otras oportunidades, y manifestar nuestra preocupación convocando a un cierre simbólico de todas las Instituciones Universitarias Nacionales, que se llevara a cabo el día 7 de noviembre de 2000.

Consejo Interuniversitario Nacional

Buenos Aires, 25 de octubre 2000

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